Con anticipación nos preparamos para la gran fiesta, participamos todos, armando el árbol de Navidad y el pesebre, realizamos compras y compras, los niños y niñas son los mas entusiasmados al ver infinidad de juguetes, compramos regalos para todos, cuando llega el gran día nos reunimos familiares, y a veces con amigos, nos llenamos de alegría con el acontecimiento más esperado como es el nacimiento de Jesús, que es luz para todos nosotros y para el mundo. Hacemos una gran cena, al llegar la media noche, hacemos el brindis, nos deseamos Feliz Noche Buena, abrimos los regalos, cenamos, y en ciertos hogares hasta se baila. Pregunto ¡ Será verdad que todo es felicidad!. ¿Pero saben?
Nos acordamos que:
-Hay hogares en los que no tienen esta y todas las noches ni un pan para comer? ¡No, es verdad!
-¿Que hay niños y niñas llorando por un juguete, porque sus padres no tienen? ¡No, es verdad!
-¿Que hay ancianos, jóvenes y niños muriendo de hambre y de frío en las calles todos los días?
¡No, es verdad!
-¿Y sobre todo, nos acordamos de invitar a JESUCRISTO a celebrar su cumpleaños?
¡No, es verdad!
Navidad es mucho mas que una tradición, Navidad es la ocasión para poner a Jesús en el centro de la espiritualidad ya sea personal, familiar o en la Comunidad en que vivimos, porque Dios nos ama y desea que su luz siempre brille en nuestros corazones como la Estrella de Belén que brillo en Oriente para guiar a los Reyes Magos.
Navidad es época para Perdonar, dar Amor, Comprensión, Paz y Justicia a la humanidad, que en todos los hogares haya humildad, unión familiar, amor al prójimo y sobre todo tener fe y amor a JESUCRISTO nuestro salvador, JESÚS dio su vida por amor a sus hijos muriendo en la Santa Cruz y nos dejó su ejemplo a todos nosotros para seguir sus huellas. Es por eso que debemos amarle, alabarle, respetarle, honrarle, pedirle perdón, agradecerle por todo las maravillas que El hace en nuestras vidas. Debemos sobre todo dar mucho amor compartiendo lo mucho o lo poco que El nos da con nuestros semejantes, pero no solo en Navidad sino todos los días de nuestra vida porque el compartir es amar, el amar es estar en gracia de Dios y su Luz siempre brillará en todos nosotros y El nos dará paz en nuestros corazones.
Nos acordamos que:
-Hay hogares en los que no tienen esta y todas las noches ni un pan para comer? ¡No, es verdad!
-¿Que hay niños y niñas llorando por un juguete, porque sus padres no tienen? ¡No, es verdad!
-¿Que hay ancianos, jóvenes y niños muriendo de hambre y de frío en las calles todos los días?
¡No, es verdad!
-¿Y sobre todo, nos acordamos de invitar a JESUCRISTO a celebrar su cumpleaños?
¡No, es verdad!
Navidad es mucho mas que una tradición, Navidad es la ocasión para poner a Jesús en el centro de la espiritualidad ya sea personal, familiar o en la Comunidad en que vivimos, porque Dios nos ama y desea que su luz siempre brille en nuestros corazones como la Estrella de Belén que brillo en Oriente para guiar a los Reyes Magos.
Navidad es época para Perdonar, dar Amor, Comprensión, Paz y Justicia a la humanidad, que en todos los hogares haya humildad, unión familiar, amor al prójimo y sobre todo tener fe y amor a JESUCRISTO nuestro salvador, JESÚS dio su vida por amor a sus hijos muriendo en la Santa Cruz y nos dejó su ejemplo a todos nosotros para seguir sus huellas. Es por eso que debemos amarle, alabarle, respetarle, honrarle, pedirle perdón, agradecerle por todo las maravillas que El hace en nuestras vidas. Debemos sobre todo dar mucho amor compartiendo lo mucho o lo poco que El nos da con nuestros semejantes, pero no solo en Navidad sino todos los días de nuestra vida porque el compartir es amar, el amar es estar en gracia de Dios y su Luz siempre brillará en todos nosotros y El nos dará paz en nuestros corazones.